El orujo, un subproducto generado tras la extracción del aceite de oliva virgen, contiene aún una cantidad significativa de aceite y otros componentes útiles. La revalorización permite poder extraer aceite de orujo de oliva, que es un producto comercializable con diversas aplicaciones, desde la alimentación hasta la cosmética, aprovechando al máximo los recursos naturales.

Al final de la cadena productiva, generamos biomasa (principalmente hueso de aceituna) que utilizamos como biocombustible. Con ello generamos una fuente de energía renovable y sostenible que contribuye a la reducción del uso de combustibles fósiles y disminuye la huella de carbono de la industria.

General d’Olis i Derivats, evita que este subproducto se convierta en un residuo contaminante. Al procesarlo y transformarlo en productos útiles, reducimos la emisión de gases de efecto invernadero y la contaminación del suelo y las aguas, cumpliendo así con la normativa medioambiental y promoviendo un modelo de producción más sostenible.

La economía circular, forma parte del ADN de nuestra empresa, la revalorización del orujo es un claro ejemplo de, donde los residuos son transformados en nuevos productos con valor añadido. Con este enfoque no solo minimizamos los desechos, sino que también fomentamos un uso más eficiente de los recursos, mejorando la sostenibilidad de la cadena de producción del aceite de oliva.

General d’Olis i Derivats fomenta la generación de empleo en áreas rurales, contribuyendo al desarrollo económico y social de estas regiones. Esto es especialmente importante en zonas donde la producción de aceite de oliva es una de las principales actividades económicas.

Nuestro aceite de orujo de oliva, es un aceite con propiedades nutricionales y culinarias beneficiosas, que se comercializa a nivel global. Nuestro producto diversifica la oferta de aceites vegetales y contribuye al posicionamiento de la industria oleícola en mercados internacionales.

A través de la mejora continua e implementación de I+D+I, General d’Olis i Derivats, obtiene otros productos como polifenoles, antioxidantes y fibras, que tienen aplicaciones en sectores como la alimentación funcional, la industria cosmética y la farmacéutica. Estos derivados no solo tienen un alto valor añadido, sino que también amplían las posibilidades de ingresos para nuestra industria.

Creemos firmemente en la innovación en tecnologías de extracción y tratamiento, impulsando la investigación y el desarrollo de nuevos productos y procesos más eficientes. Esto mantiene a la industria del aceite de orujo en la vanguardia tecnológica y mejora la competitividad del sector.

Al revalorizar el orujo, General d’Olis i Derivats ayuda a las almazaras a reducir los costos asociados con la gestión y eliminación de residuos, transformándolos en una fuente de ingresos. Esto optimiza la rentabilidad de las almazaras y contribuye a la sostenibilidad financiera del sector.

En resumen, General d’Olis i Derivats, ofrece beneficios ambientales, económicos y sociales que fortalecen la industria oleícola, promoviendo la sostenibilidad y aportando valor añadido a la cadena productiva del aceite de oliva.

General d’Olis i Derivats, juega un papel fundamental en la cadena de producción de aceite de oliva, proporcionando una serie de beneficios clave a las almazaras y molinos de aceite.

Las almazaras generan una gran cantidad de subproductos, como el alperujo (mezcla de pulpa, piel, hueso de aceituna y agua), que requieren una gestión adecuada.

Aquí es donde General d’Olis i Derivats entra en acción, recolectando y procesando estos subproductos, reduciendo la necesidad de almacenaje y tratamiento por parte de las almazaras, lo que disminuye costos y problemas medioambientales.

El proceso de extracción del aceite de orujo nos permite obtener aceite de orujo de oliva y otros productos valiosos como biomasa (hueso de aceituna) que puede utilizarse como fuente de energía renovable. Con ello, maximizamos el aprovechamiento del fruto de la aceituna y generamos valor adicional para la cadena productiva.

Al procesar los residuos de las almazaras, General d’Olis i Derivats, contribuye significativamente a la sostenibilidad del sector oleícola. Disminuyendo la carga contaminante del proceso de extracción de aceite de oliva al minimizando los vertidos y emisiones, ayudando a las almazaras a cumplir con la normativa ambiental vigente.

Con la recuperación y valorización de los subproductos no solo reducimos costos, sino que también generamos ingresos adicionales, ya que los derivados del proceso (como la biomasa) tienen demanda en los mercados energéticos y de alimentación animal. Esto diversifica las fuentes de ingresos de las almazaras y mejora su rentabilidad.

General d’Olis i Derivats, proporciona soluciones tecnológicas y logísticas que optimizan la recolección, transporte y tratamiento de los subproductos, permitiendo a las almazaras enfocarse en su actividad principal: la producción de aceite de oliva virgen.

Nuestro modelo de operación de la industria del aceite de orujo es un ejemplo de economía circular, donde transformamos residuos en nuevos recursos. Con esto no solo promovemos un uso más eficiente de los recursos naturales, sino que también reforzamos la imagen del sector como una industria innovadora y comprometida con el medio ambiente.

General d’Olis i Derivats, trabaja para gestionar los subproductos de manera eficiente y sostenible y ayuda a las almazaras a reducir costos operativos y a mejorar su posición competitiva en el mercado. Además, valorizando los residuos fortalecemos la resiliencia económica del sector ante las fluctuaciones del mercado del aceite de oliva.

General d’Olis i Derivats ofrece servicios que no solo alivian la carga operativa y ambiental de las almazaras, sino que también generamos nuevas oportunidades de negocio, impulsando la sostenibilidad y contribuyendo a la economía circular del sector oleícola.

La integración de energías renovables como las placas solares y la biomasa en cada una de nuestras plantas productivas ayudan a reducir costos energéticos y a disminuir la huella de carbono de nuestras fábricas, haciéndolas así más sostenibles.

La instalación de paneles solares fotovoltaicos nos permite generar electricidad para el funcionamiento de nuestros equipos y maquinaria en las plantas de procesamiento, como bombas, cintas transportadoras y sistemas de control.

Utilizamos sistemas solares térmicos para calentar agua o generar vapor, que es esencial en varios de nuestros procesos industriales, como la extracción del aceite y la limpieza de equipos. Este calor solar ayuda a reducir la dependencia de combustibles fósiles o energía eléctrica convencional.

La energía generada la utilizamos principalmente para autoconsumo, lo que disminuye significativamente la factura energética. Los excedentes son vertidos a la red eléctrica, generando ingresos adicionales.

Gracias a la integración de placas solares, disminuimos la necesidad de comprar energía de la red, reduciendo los costos operativos, reducimos las emisiones de CO₂ asociadas a la generación de electricidad a partir de fuentes no renovables.

A su vez, minimizamos la vulnerabilidad a fluctuaciones en los precios de la energía.

Los restos del orujo, como huesos y pulpa, los utilizamos como biomasa para alimentar calderas que generan energía térmica. Esta energía se emplea en la generación de vapor, necesario para la extracción del aceite de orujo y otros procesos industriales.

Algunas de nuestras plantas de orujo implementan sistemas de cogeneración que permiten la producción simultánea de electricidad y calor a partir de gas natural. Esto maximiza la eficiencia energética y reduce la dependencia de fuentes externas de energía.

Compactamos y convertimos los residuos sólidos del orujo en pellets, que luego se utilizan como combustible renovable para generar energía.

Almacenamos en lugares adecuados todas las cenizas producidas en nuestras plantas para luego venderlas a otras industrias de tratamiento, dándole uso como fertilizantes

Así pues, convertimos varios subproductos que tradicionalmente serían un desecho en una fuente de energía renovable o en materias útiles en otros destinos.

Al utilizar biomasa, emitimos menos gases de efecto invernadero en comparación con los combustibles fósiles, ya que el CO₂ liberado es parte del ciclo natural del carbono.

El uso de biomasa reduce la compra de combustibles externos y minimiza los costos energéticos operativos.

La combinación de energía solar y biomasa mejora significativamente la sostenibilidad de nuestra industria, contribuyendo a una economía circular y baja en carbono.

Al reducir los costos energéticos y gestionar mejor los residuos, nuestra empresa mejora su rentabilidad y competitividad en el mercado.

Fomentamos el desarrollo económico en áreas rurales, donde se ubican muchas plantas de procesamiento de aceite de orujo, creando empleo y dinamizando la economía local.

La integración de estas fuentes de energía renovable en nuestra industria del aceite de orujo representa un avance significativo hacia un modelo más eficiente, rentable y respetuoso con el medio ambiente, valores que General d’Olis i Derivats cree firmemente.

En General d’Olis i Derivats nos tomamos muy en serio el maximizar el uso de los recursos y minimizar los residuos mediante la reutilización, reciclaje y valorización de los subproductos generados en nuestros procesos de producción, dando siempre un enfoque sostenible a nuestras empresas.

El aceite de orujo de oliva se obtiene a partir del orujo, un subproducto sólido que resulta de la extracción del aceite de oliva. Este orujo contiene pulpa, piel, huesos y restos de aceite.

En lugar de desecharse, nosotros lo sometemos a un proceso de extracción para obtener el aceite de orujo, lo que maximiza el aprovechamiento del material residual de la aceituna.

Los huesos y la pulpa del orujo los utilizamos como biomasa para generar energía térmica y eléctrica, tanto en nuestras propias plantas de procesamiento como en otras industrias, reduciendo la dependencia de combustibles fósiles.

Los restos orgánicos del orujo pueden compostarse y usarse como fertilizantes, mejorando la calidad del suelo y cerrando el ciclo de nutrientes en la agricultura.

Algunos componentes que extraemos del orujo, como polifenoles y otros antioxidantes, se utilizan en la industria cosmética y farmacéutica por sus propiedades beneficiosas para la piel y la salud.

Implementamos procesos de producción más eficientes y tecnologías limpias que nos ayudan a reducir los residuos y las emisiones de CO₂. Por ejemplo, la utilización de calderas de biomasa para la generación de energía reduce significativamente la huella de carbono de la industria y distintos filtros de partículas que disminuyen muy considerablemente la emisión de partículas a la atmosfera.

El agua utilizada en nuestros procesos de extracción es reciclada y reutilizada utilizándola como riego en nuestros campos de cultivo, minimizando su consumo y reduciendo el vertido de aguas residuales.

Reducimos los residuos sólidos y líquidos, mejoramos la eficiencia en el uso de recursos naturales y disminuimos las emisiones de gases de efecto invernadero.

La valorización de subproductos genera nuevas fuentes de ingresos, reducimos costos de energía y de gestión de residuos, y creamos oportunidades de empleo en áreas rurales.

La economía circular en nuestras plantas de aceite de orujo no solo contribuye a la sostenibilidad ambiental, sino que también impulsa un modelo de negocio más eficiente y rentable.